
Todas estas piezas surgieron de la necesidad de evolucionar y no quedarme estancada. Surgieron como un grito de esperanza en un mal momento de mi vida en el que como siempre el barro me salvó, vino en mi busca y me animó a continuar y fue paciente porque necesité tiempo para que de nuevo, las ideas se apoderaran de mi mente y comenzara el proceso. El maravilloso proceso creativo en el que partiendo de un simple trozo de barro aparecieran por ejemplo ... ...
Las caminantas: Que es mi pequeño homenaje a la mujer, a las mujeres de mi familia y a todas las del mundo. Al papel que representamos en la sociedad de hoy en día en la que parece que tenemos que ser máquinas. Mujeres fuertes que a pesar de los golpes de la vida continúan siempre hacia delante. Algunas no tienen brazos, simbolizando la pérdida de algo porque siempre hay que hacer renuncias para ganar otras cosas.
El mar es aquí lo desconocido, los retos a los que nos tenemos que enfrentar cada día. Mis caminantas lo desafían y le demuestran que continuarán ahí, de pie, una vez haya pasado el oleaje. (T.Aguilar).