viernes, 7 de diciembre de 2012

Otro


Guarda tu amor humano para cuando te haga falta.
Déjalo que descanse un poco más en tus bolsillos. 
Vives en la parte negra de mis ojos y aún no has visto nada. 
Quizás porque nunca te atreviste a mirar. 

Guarda tu amor humano.
Déjalo descansar tranquilo.
Pero no me haces caso (como siempre) y entonces, delicadamente metes la mano derecha en en tu bolsillo izquierdo y sacas un pequeño objeto que brilla con tal fuerza que se encienden las luces de todas las farolas. 
La gente cegada por el resplandor se asoma a las ventanas y te grita al unísono ... ...
¡¡ La luz !! Vamos, déjala respirar.

Tú respondes muy fuerte ... ...
La luz es una prolongación de los ojos más bonitos del mundo.
Tomadla, compartidla y quizás podáis ver. (T.Aguilar).